21.3.25

Experiencia e IA

Esto que os presento es un trauma muy grave por la rotura de pierna tras un accidente en moto.

Ha habido intervención quirúrgica con aplicación de placas de sujeción del fémur.

Aparentemente el postosperatorio no tiene que dar ningún problema, en poco tiempo podría hacer una buena rehabilitación fisioterápica que le ayude a devolver información nerviosa y potencia muscular. Nuestro amigo quiere que se lo haga yo desde el punto de vista osteopático. Toda esta información es en conversación telefónica. Le pido que me mande fotografías de la pierna porque me dice que están haciendo un seguimiento diario desde enfermería. 

Esto es lo que me envía: 





La verdad es que me sorprende y bajo mi falta de experiencia en los efectos que veo en piel realizo busqueda através de IA sobre lo visto en fotografias y recomendaciones en varias preguntas que realizo.

la primera es que me analice una de las imagenes que le he enviado. Su respuesta:

Esta imagen muestra lo que parece ser una herida grave en la pierna. Hay una lesión con una gran costra necrótica de color amarillo y negro, rodeada por tejido inflamado y enrojecido. También se observan otras lesiones más pequeñas alrededor de la principal.

Algunos puntos clave para analizar:

1. Posible necrosis: La costra oscura y gruesa podría indicar tejido muerto, lo que podría retrasar la cicatrización.

2. Infección: El enrojecimiento alrededor de la herida podría ser un signo de infección en curso.

3. Ulceración: Si la herida es profunda y no cicatriza bien, podría tratarse de una úlcera, tal vez por mala circulación o una condición subyacente como diabetes.

4. Necesidad de atención médica: Una herida así requiere una evaluación profesional para determinar el mejor tratamiento, que podría incluir limpieza quirúrgica, antibióticos o incluso hospitalización si hay complicaciones.

¿Quieres analizar esta imagen desde un punto de vista más clínico o tienes alguna pregunta específica sobre ella?

Le pido que lo analice desde un punto de vista clínico. Respuesta:

Desde un punto de vista clínico, la imagen muestra una lesión ulcerativa con escara necrótica, lo que sugiere un proceso avanzado de daño tisular. A continuación, un análisis más detallado:

Características clínicas observadas

  1. Escara necrótica (tejido muerto)

    • La lesión central tiene una costra gruesa de color amarillento, marrón y negro, indicativa de necrosis coagulativa.
    • La presencia de tonos oscuros podría indicar tejido desvitalizado con riesgo de infección.
  2. Inflamación perilesional

    • El tejido circundante muestra eritema (enrojecimiento), lo que puede sugerir celulitis o una respuesta inflamatoria activa.
    • Hay signos de edema, lo que indica compromiso vascular o linfático.
  3. Lesiones satélite

    • Se observan pequeñas heridas cercanas, lo que podría estar relacionado con diseminación infecciosa, insuficiencia vascular o fragilidad cutánea.
  4. Posible infección subyacente

    • La combinación de necrosis y eritema podría sugerir una infección profunda como una fasciitis necrosante o una osteomielitis si el hueso está comprometido.
    • La presencia de pus o mal olor sería un signo de infección activa.

Posibles diagnósticos diferenciales

  • Úlcera por presión o insuficiencia venosa → Si el paciente tiene factores de riesgo como inmovilidad o varices.
  • Úlcera diabética → Si hay antecedentes de diabetes mellitus con neuropatía.
  • Fasciitis necrosante → Si hay dolor desproporcionado y signos sistémicos (fiebre, taquicardia).
  • Pioderma gangrenoso → Si hay enfermedad autoinmune de base.

Manejo clínico recomendado

  1. Evaluación médica urgente

    • Evaluar signos sistémicos de infección (fiebre, escalofríos, taquicardia).
    • Solicitar estudios como hemograma, PCR, cultivo de secreción y doppler vascular si se sospecha insuficiencia arterial o venosa.
  2. Desbridamiento quirúrgico

    • La escara necrótica impide la cicatrización y puede favorecer la infección.
  3. Antibioticoterapia empírica

    • En caso de signos de infección, iniciar antibióticos de amplio espectro (ej. piperacilina/tazobactam, vancomicina si hay sospecha de Staphylococcus resistente).
  4. Cuidados avanzados de heridas

    • Uso de apósitos especiales según la evolución (hidrogeles, colagenasa, terapia de presión negativa).
  5. Optimización de comorbilidades

    • Control glicémico en diabéticos.
    • Evaluación vascular en caso de insuficiencia arterial o venosa.

Conclusión

Esta herida tiene signos de necrosis e inflamación, lo que puede comprometer la recuperación sin una intervención adecuada. Se recomienda una evaluación médica inmediata para determinar el nivel de compromiso y establecer el tratamiento adecuado.

Si tienes más detalles sobre el paciente (edad, enfermedades previas, tiempo de evolución), podemos afinar más el análisis.

Aporto edad del paciente, alguna lesión previa que ha sufrido en la rodilla y que este es el resultado de una fractura por caida en moto. Su respuesta:

Gracias por la información adicional. Dado que la lesión proviene de una fractura de pierna por accidente de moto, el contexto clínico cambia un poco, y ahora podemos enfocarnos en posibles complicaciones postraumáticas.

Evaluación clínica de la herida en este contexto

El paciente de 50 años con una lesión postraumática presenta necrosis en la zona de la herida. En un caso así, hay varios factores de riesgo a considerar:

  1. Complicaciones postraumáticas y postquirúrgicas

    • Si hubo una fractura expuesta, la herida podría haberse contaminado desde el inicio.
    • Si se realizó cirugía (osteosíntesis con placas, clavos o tornillos), hay riesgo de infección de los materiales de fijación (osteomielitis).
  2. Compromiso vascular

    • Si la fractura lesionó arterias importantes, el flujo sanguíneo puede estar comprometido, lo que impide la cicatrización y predispone a necrosis.
    • Un Doppler arterial ayudaría a evaluar la perfusión en la extremidad.
  3. Infección profunda

    • La presencia de tejido necrótico es un caldo de cultivo para bacterias, y la infección puede extenderse a planos profundos (fasciitis necrosante, osteomielitis).
    • Signos de alarma: fiebre, dolor intenso, secreción purulenta con mal olor.
  4. Lesión previa de rodilla

    • Si hubo daño en la articulación o estructuras adyacentes, la recuperación puede ser más difícil, especialmente si hay limitación del movimiento o problemas previos de circulación.

Próximos pasos clínicos recomendados

  1. Evaluación vascular y ósea inmediata

    • Doppler arterial y venoso: para evaluar circulación en la pierna.
    • Radiografía ósea / RMN: para descartar osteomielitis si la infección se ha propagado al hueso.
  2. Limpieza y desbridamiento quirúrgico

    • El tejido necrótico debe ser removido quirúrgicamente para evitar la propagación de la infección.
  3. Cultivo de la herida y antibióticos

    • Se recomienda tomar muestras para identificar bacterias y seleccionar el antibiótico adecuado.
    • Si hay signos de infección severa, iniciar antibióticos de amplio espectro (ej. vancomicina + piperacilina/tazobactam).
  4. Terapia de heridas avanzadas

    • Uso de apósitos con hidrogeles, colagenasa o terapia de presión negativa para favorecer la cicatrización.
  5. Seguimiento con traumatología y cirugía vascular

    • Si hay problemas de irrigación sanguínea, podría ser necesaria una cirugía reconstructiva o injertos de piel.

Conclusión

La lesión parece complicada por necrosis e inflamación, lo que indica un alto riesgo de infección profunda u osteomielitis. Se recomienda una evaluación médica inmediata para descartar complicaciones graves y definir el mejor tratamiento.

Le pido recomendación en intervención desde el punto de vista osteapático y de masaje, y corrobora lo que estuvimos hablando por teléfono, que se resumió en que terminara con sus curas y ver evolución. 

Respuesta IA:

Desde el punto de vista de un osteópata o masajista, el enfoque en este tipo de lesión debe ser extremadamente cuidadoso, ya que estamos ante una herida con necrosis, riesgo de infección y posible compromiso vascular. Aquí van algunas recomendaciones clave:

1. No manipular directamente la zona afectada

Evitar masajes, presiones o manipulaciones sobre o cerca de la herida, ya que esto podría:

  • Aumentar el riesgo de diseminación de la infección.
  • Agravar la inflamación o comprometer más el tejido.
  • Provocar dolor innecesario.

2. Enfoque en el manejo del entorno musculoesquelético

Si la lesión ya está siendo tratada por un equipo médico, un osteópata o masajista podría ayudar en otros aspectos:

  • Movilización pasiva y activa asistida (si está permitido):
  • Trabajar suavemente la movilidad de articulaciones cercanas (rodilla, tobillo) para evitar rigidez y pérdida de función.
  • En caso de fractura consolidada, ejercicios isométricos pueden prevenir atrofia muscular.

Trabajo en zonas compensatorias:

Muchas veces, el paciente adopta posturas de protección que generan sobrecarga en la espalda, pelvis o la pierna contraria. Aquí sí se puede intervenir con técnicas suaves de liberación miofascial o masaje descontracturante.

Drenaje linfático manual (con precaución):

Si hay edema en la pierna y no hay signos de trombosis o infección activa, el drenaje linfático puede ayudar a mejorar la circulación y la recuperación de los tejidos.

3. Evitar terapias térmicas o eléctricas sobre la herida

No aplicar calor ni electroterapia en la zona afectada, ya que esto podría estimular la inflamación y la diseminación de la infección.

En algunos casos, la crioterapia controlada (frío) podría usarse lejos de la herida para reducir inflamación en tejidos adyacentes.

4. Recomendaciones para el paciente

Como osteópata o masajista, puedes guiar al paciente en hábitos que favorezcan su recuperación:

Control postural y de carga:

Enseñar cómo distribuir mejor el peso al caminar o al sentarse para evitar sobrecarga en la pierna afectada.

Alimentación y suplementación:

Asegurar un buen aporte de proteínas, zinc y vitamina C para la regeneración tisular.

Higiene y cuidado de la herida:

Aunque esto es competencia médica, puedes recordarle la importancia del control de infecciones y la correcta limpieza según indicaciones médicas.

Conclusión:

El rol del osteópata o masajista en este caso debe ser complementario, enfocándose en mejorar la movilidad, prevenir compensaciones posturales y ayudar a la recuperación funcional sin intervenir directamente en la herida.

 Siempre es fundamental trabajar en coordinación con el equipo médico para evitar riesgos.

Si el paciente está en una fase avanzada de recuperación y la herida ya está cerrando, se podría considerar una rehabilitación más activa, pero siempre con precaución. Aqui entra el fisioterapeuta. Nosotros desde la experiencia en la fase de cicatrización:

Movilización de cicatriz: Técnicas para mejorar la y funcionalidad

Cuando una herida ha cerrado completamente y la cicatrización está en curso, pueden formarse adherencias y restricciones fasciales, lo que limita la movilidad y puede generar dolor o tirantez. La movilización de cicatriz ayuda a:

✅ Mejorar la elasticidad de la piel y tejidos subyacentes.

✅ Prevenir fibrosis y adherencias que limiten el movimiento.

✅ Disminuir la sensación de tirantez y dolor.

✅ Favorecer la circulación sanguínea y linfática.

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🟢 Indicaciones para empezar la movilización de cicatriz

🔹 Cuándo:

La cicatriz debe estar completamente cerrada y sin signos de infección (rojez intensa, secreción, dolor agudo).

Generalmente se empieza 3-6 semanas después de la herida, dependiendo de la cicatrización del paciente.

🔹 Cuánto:

Duración: 5-10 minutos por sesión.

Frecuencia: 1-2 veces al día, dependiendo de la tolerancia del paciente.

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🛠️ Técnicas de movilización de cicatriz

1️⃣ Masaje en direcciones múltiples (despegamiento de cicatriz)

📌 Objetivo: Despegar la cicatriz del tejido subyacente para mejorar movilidad.

🔹 Cómo hacerlo:

Con los dedos índice y pulgar, toma la piel de la cicatriz y muévela en diferentes direcciones (arriba-abajo, derecha-izquierda, en círculos).

Asegúrate de que no haya dolor excesivo.

⏳ Tiempo: 1-2 minutos en cada zona de la cicatriz.

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2️⃣ Rodamiento cutáneo

📌 Objetivo: Mejorar la elasticidad de la piel y estimular la circulación.

🔹 Cómo hacerlo:

Con el pulgar y los dedos, toma un pliegue de piel y ruédalo suavemente sobre la cicatriz y sus alrededores.

Si el paciente siente dolor o mucha tensión, reducir la intensidad y repetir progresivamente.

⏳ Tiempo: 2-3 minutos.

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3️⃣ Estiramiento manual de la cicatriz

📌 Objetivo: Disminuir la retracción del tejido cicatricial.

🔹 Cómo hacerlo:

Coloca los dedos en ambos lados de la cicatriz y estira la piel suavemente en direcciones opuestas.

Mantén el estiramiento 10-15 segundos y suelta.

Se pueden hacer en distintas direcciones según la cicatriz.

⏳ Tiempo: 5 repeticiones por zona.

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4️⃣ Presión profunda (método de presión mantenida)

📌 Objetivo: Reducir hipersensibilidad y mejorar la integración del tejido.

🔹 Cómo hacerlo:

Coloca un dedo o nudillo sobre la cicatriz y aplica una presión moderada y sostenida.

Mantén la presión por 30-60 segundos y suelta.

⏳ Tiempo: 3-4 repeticiones en diferentes puntos de la cicatriz.

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5️⃣ Uso de masajeadores o ventosas (opcional, en fases avanzadas)

📌 Objetivo: Movilizar la fascia y mejorar el deslizamiento del tejido cicatricial.

🔹 Cómo hacerlo:

Se pueden usar ventosas de silicona para hacer deslizamientos sobre la cicatriz.

También se puede aplicar un rodillo de masaje para estimular el área.

No usar en cicatrices recientes o sensibles.

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💡 Consejos adicionales

✅ Aplicar crema hidratante (aceite de rosa mosqueta, aloe vera o crema con vitamina E) para facilitar el masaje.

✅ Controlar la tolerancia del paciente y ajustar la intensidad según su respuesta.

✅ Evitar movimientos bruscos o dolor excesivo; el masaje debe ser firme pero no causar molestias intensas.

✅ Combinar con ejercicios de movilidad de la articulación cercana para mejorar funcionalidad.

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🔴 Cuándo NO hacer movilización de cicatriz

🚫 Si la cicatriz aún está abierta o tiene signos de infección.

🚫 Si hay mucho dolor o sensibilidad extrema.

🚫 Si el paciente tiene problemas de cicatrización como queloides o granulación sin evaluación médica previa.



22.2.25

¿Por qué utilizar Osteopatía?

 Este artículo tiene la intención de aclarar algunos aspectos que como osteópata profesional me encuentro con la obligación de dibujar a la osteopatía tal y como es.    

Según la Real Academia de la Lengua Española (RAE), Osteopatía:

De osteo- y -patía.
f. Med. Enfermedad ósea.
f. Terapia de medicina complementaria consistente en aplicar masajes y otras técnicas de manipulación de los músculos y las articulaciones con el fin de restablecer el funcionamiento normal del cuerpo humano

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) 

"La osteopatía (también llamada medicina osteopática) depende del contacto manual para el diagnóstico y tratamiento. Respeta la relación entre el cuerpo, la mente y energía; Pone énfasis en la integridad estructural y funcional del cuerpo y su tendencia intrínseca a autosanarse"

https://iris.who.int/bitstream/handle/10665/44356/9789241599665_eng.pdf?sequence=1

La Normativa Europea 16686/2015 define a la Osteopatía como una disciplina sanitaria de primera intención y centrada en el paciente.

Según la Wikipedia... Mejor no comentarlo, remito al artículo escrito en mi página web, en el que hablo de la seguridad de la Osteopatía:

 https://jeexperience.com/osteopatia-eficacia-y-seguridad/

En cualquier situación de disfunción que una persona esté sufriendo, y que le esté causando dolor, malestar, falta de energía, desgana, etc., ¿Por qué elegir la Osteopatía?

La Osteopatía es una terapia manual que se centra en la interrelación entre la estructura y la función del cuerpo. Entre sus principales beneficios se encuentran:

  • Alivio del dolor: Muchas personas encuentran que la osteopatía ayuda a disminuir dolores musculares, articulares y de espalda, al trabajar sobre las tensiones y restricciones en el tejido conectivo.
  • Mejora de la movilidad: Las técnicas osteopáticas pueden favorecer un rango de movimiento más amplio y reducir la rigidez en las articulaciones, lo que contribuye a una mayor flexibilidad.
  • Optimización de la circulación: Al liberar tensiones y mejorar la alineación, se estimula la circulación sanguínea y linfática, lo que facilita la oxigenación y nutrición de los tejidos.
  • Enfoque holístico: Esta práctica trata de abordar la causa subyacente de las molestias, considerando el cuerpo como un sistema integrado en el que cada parte influye en el conjunto.
  • Reducción del estrés y promoción del bienestar: El tratamiento puede inducir una sensación de relajación profunda, ayudando a disminuir el estrés y mejorar el equilibrio general del organismo.

Es importante recordar que los resultados pueden variar de persona a persona, y la osteopatía suele ser más efectiva cuando se integra con otros cuidados de salud. Siempre es recomendable consultar a un profesional especializado para determinar si este enfoque es adecuado según las necesidades individuales.

La osteopatía es una terapia manual con muchos beneficios, pero también existen algunos mitos que generan confusión. Aquí te dejo algunos de los más comunes:  

### 🔹 **Mito 1: La osteopatía solo sirve para el dolor de espalda**  

✅ **Realidad:** Aunque es muy efectiva para tratar problemas de espalda, la osteopatía también ayuda con molestias en las articulaciones, problemas digestivos, estrés, migrañas y más.  

### 🔹 **Mito 2: La osteopatía no tiene base científica**  

✅ **Realidad:** La osteopatía se basa en conocimientos de anatomía, fisiología y biomecánica. Muchos estudios respaldan su efectividad en el tratamiento del dolor musculoesquelético y otras afecciones.  

### 🔹 **Mito 3: Es lo mismo que un masaje terapéutico**  

✅ **Realidad:** Aunque ambas técnicas usan el contacto manual, la osteopatía busca restaurar la movilidad del cuerpo y tratar la causa del problema, mientras que el masaje se enfoca en la relajación y alivio muscular.  

### 🔹 **Mito 4: La osteopatía es dolorosa o peligrosa**  

✅ **Realidad:** Un buen osteópata adapta las técnicas a cada persona para que el tratamiento sea seguro y sin dolor. En manos de un profesional cualificado, la osteopatía es una terapia efectiva y segura.  

### 🔹 **Mito 5: Solo las personas con lesiones necesitan osteopatía**  

✅ **Realidad:** La osteopatía no solo trata lesiones, sino que también ayuda a prevenir problemas, mejorar la postura, reducir el estrés y optimizar el bienestar general.  

Si tienes dudas sobre la osteopatía o quieres probar sus beneficios, siempre es recomendable acudir a un profesional cualificado. ¿Has probado alguna vez un tratamiento osteopático? 💆‍♂️💆‍♀️

Es importante que en países como España, que el legislador está ocioso a la hora de hacer su trabajo como mandan las leyes españolas, europeas y mundiales, te asegures muy bien de quién es un osteópata profesional cualificado y quién se hace pasar por un osteópata actuando con imprudencia sin tener las bases académicas adecuadas proporcionadas por estudios universitarios específico en osteopatía, que constan de:

Formación Tipo I

Duración mínima de 4800 horas presenciales, equivalentes a no menos de 240 ECTS, de los cuales, al menos 60 ECTS deben corresponder a formación de 2º ciclo (calificación equivalente a Grado + Máster).

La misma debe incluir no menos de 1000 horas de práctica clínica supervisada obligatoria.

Formación Tipo II

Profesionales que dispongan de un Título Universitario en Ciencias de la Salud.

Programa formativo que, en ningún caso, podrá ser inferior a 120 ECTS específicos de osteopatía o a 1500 horas presenciales.

La misma debe incluir no menos de 1000 horas de práctica clínica supervisada obligatoria.

Son estudios de 5 años y 2 años, respectivamente.

En cuanto a la evidencia científica ya mencionada, existen infinidad de artículos en las revistas de investigación donde se hablan de los beneficios de la osteopatía.

Pondremos dos ejemplos en este artículo sobre la ciencia de la Osteopatía:

El primero de ellos es un artículo de agosto de 2022 sobre "el papel de la atención osteopática en ginecología y obstetricia"; una revisión sistemática actualizada que habla de los esfuerzos que se han realizado para encontrar estrategias más seguras y factibles para mejorar la atención ginecológica. Este artículo que mencionamos tiene como objetivo informar sobre la efectividad del tratamiento osteopático en el campo de la ginecología y la obstetricia, actualizando una publicación anterior de 2016.

En ese artículo se habla de los diferentes tipos de condición clínica y se refiere al dolor pélvico, vulvodinia, dismenorrea, endometriosis, síndrome de ovario poliquístico, esterilidad, embarazo, mano de obra, posparto y menopausia.

Los resultados mostraron, concluyen los autores, la efectividad de la atención osteopática en ginecología y obstetricia. 

Sí es verdad que la evidencia es limitada, osteopatía es una ciencia muy joven en cuanto a investigaciones, no obstante, sugiere dicho artículo que la atención osteopática es segura cuando se complementa con la atención del médico especialista en ginecología.

Artículo firmado por Nuria Ruffini, Giandomenico D'Alessandro, Annalisa Pimpinella, Matteo Galli, Tiziana Galeoti, Francesco Cerritelli, Marco Tramontano; Con identificación PMC9408311 de 18 de agosto de 2022.

Otro artículo de 2024 sobre los efectos biológicos notificados tras el tratamiento manipulativo osteopático"; una revisión exhaustiva indica que se han detectado modificaciones biológicas que parecen ser inducidas por las técnicas de manipulación osteopáticas (TMO) en varios sistemas corporales, pero principalmente en correlatos neurofisiológicos y cambios musculoesqueléticos. 

Es un artículo firmado por Fulvio dal Farra, Andrea Bergna, Christian Lunghi, Irene Bruini, Matteo Galli, Luca Vismara, Marco Tramontano en junio de 2024. https://doi.org/10.1016/j.ctim.2024.103043

Con toda esta información esperamos que el lector tenga una más amplia realidad sobre la Osteopatía y sus efectos y sobre todo, hay que mencionarlo, que no se dejen engañar por las faltas de leyes en España de 3 cosas muy importantes:

  1. La Osteopatía solo la debe ejercer el osteópata cualificado académicamente oficial;
  2. La Osteopatía no es fisioterapia; ni el fisioterapéuta es osteópata;
  3. La Osteopatía no es una terapia alternativa; es una terapia complementaria e integrativa.

José Enrique García G.

Osteópata Normativa Europea EN16686/2015

Máster en Osteopatía Bajo Evidencia Científica y Experiencia Clínica 

24.1.25

Artrosis y Osteopatía

 La artrosis es un proceso degenerativo que a día de hoy, no tiene un tratamiento complaciente para quien la padece. 

Debo apuntar que la artrosis viene precedida no solamente por la edad, (se relaciona a más edad, mayor artrosis), sino por la falta de cuidados de la propia persona que la padece. Por ejemplo: ¿Quién no ha sufrido un esguince de tobillo, o de muñeca, o de rodilla, y como el dolor no era fuerte, y además, fue desapareciendo, lo ha dejado correr sin más tratamiento? 

O ¿quién no ha padecido un lumbago pasajero, de esos que nos levantamos doloridos en la zona baja de la espalda, y no le damos mayor importancia porque nos deja seguir haciendo nuestra rutina diaria y también desaparece en un par de días? 

¿Os acordáis de aquella vez que no pudimos levantarnos de la cama durante tres días por esos dolores ciáticos y lo máximo que nos hicieron fue inyectarnos dosis de corticoides?

 Estos ejemplos reflejan algo que ya hemos hablado en artículos anteriores en este blog, la conclusión que las lesiones o enfermedades no desaparecen solas. El organismo se va adaptando compensándose para aplicarse a una nueva posición en el espacio, y poco a poco vamos notando cómo la espalda se nos encorva cada vez más; cómo nuestras manos van cambiando su fisonomía; cómo las rodillas van girando hacia afuera o hacia adentro, y todo esto con más dolor cada día que pasa, con más esfuerzo que necesitamos hacer por la mañana al levantarnos de la cama, incluso cuando nos ponemos de pie después de un rato de estar sentados.

 Esto es la artrosis. Producto de:

1. Desgaste propio por el tiempo; Durante toda nuestra vida nos movemos, la articulación tiene un roce que va haciendo que el cartílago de conjunción vaya limándose desproporcionalmente, y los osteoblastos, que son células del hueso, comienzan a crear, también desproporcionadamente, tejido óseo para compensar el desgaste cartilaginoso, del cual no existe tejido celular que recupere esa rotura del cartílago. 

Sintetizando; El cartílago se destruye, no existen obreros para recuperar lo destruido y entran en acción los obreros que fabrican hueso, pero no tienen patrones para volver a crearlo de forma uniforme, con lo cual aparecen picos de hueso, (osteofitos). Y esto nos lleva a otro problema severo, y es que esos picos de hueso van pellizcando tejido de conexión nerviosa, con lo cual, el dolor se incrementa por la inflamación secundaria que se produce, llamándose esto "artritis reumatoidea".

Osteofitos en rodilla


Osteofitos en columna cervical






Osteofitos en mano

2. Desgaste por sobrepeso; aquí podemos hablar lo mismo que en el punto 1, pero con más peso, con lo que hay más presión en la articulación, consiguiendo que ese desgaste de cartílago sea mucho más rápido.

3. Falta de cuidados de esas lesiones que he hablado anteriormente; esto produce que no se consiga un deslizamiento articular normal y volvemos al problema del exceso de roce articular.

4. Malas posiciones continuadas; esto nos lleva a la misma explicación del punto 3

Estos son algunos casos de artrosis en imágenes:



Lo que también es cierto, decía uno de mis maestros, el Dr. Fernández Vilches, D. Leopoldo, psiquiatra y forense, que en cuanto nacemos tenemos peso y movimiento, por lo cual comienza el desgaste. Esto me lleva a que también la genética cuenta en la velocidad y resultados de un deterioro, ya sea normal o exagerado.

Hay decenas de fórmulas para paliar la artrosis, que no eliminarla, como ya he apuntado, no existen células que registren la recomposición de cartílago. A mí la fórmula que más me gusta, quizá sea porque es la que utilizo y la que encuentra resultados, es la que utilizamos en masaje deportivo y osteopatía, que no es otra cosa que lubricar la articulación provocando el riego de líquido sinovial para que:

1. Desacelerar el desgaste;
2. Suavizar el rozamiento de hueso.

¿Qué aporta la Osteopatía en reumatología?

La osteopatía puede ser una herramienta complementaria valiosa en el tratamiento de trastornos reumatológicos. Su enfoque holístico busca aliviar el dolor, mejorar la movilidad y optimizar la función corporal en personas que padecen enfermedades reumatológicas, como la artritis reumatoide, la artrosis, la espondilitis anquilosante, entre otras.

Beneficios de la osteopatía en reumatología

  1. Reducción del dolor: Las técnicas osteopáticas, como manipulaciones suaves, movilizaciones articulares y estiramientos, pueden ayudar a disminuir el dolor al mejorar la circulación, liberar tensiones musculares y reducir inflamaciones locales.

  2. Mejora de la movilidad: Las articulaciones afectadas por enfermedades reumatológicas suelen volverse rígidas y perder rango de movimiento. La osteopatía puede ayudar a recuperar parte de esa movilidad, promoviendo una mejor calidad de vida.

  3. Corrección de desequilibrios posturales: Las enfermedades reumatológicas pueden generar adaptaciones posturales debido al dolor o la rigidez. El osteópata puede identificar y tratar estas compensaciones para prevenir futuras complicaciones.

  4. Alivio del estrés y mejora del bienestar: Muchas personas con enfermedades reumatológicas experimentan estrés crónico debido a su condición. Las sesiones de osteopatía pueden promover la relajación y un mayor equilibrio emocional.

¿Qué técnicas se utilizan?

  • Técnicas de tejidos blandos: Masaje suave para relajar los músculos y mejorar el flujo sanguíneo.
  • Movilización articular: Movimientos pasivos suaves para aliviar la rigidez.
  • Técnicas de energía muscular: Ejercicios activos en los que el paciente colabora para mejorar la elasticidad muscular.
  • Liberación miofascial: Trabajo sobre las fascias para reducir tensiones y mejorar la función.

Consideraciones importantes

  1. No reemplaza el tratamiento médico: La osteopatía debe considerarse un complemento a la atención médica tradicional, no un sustituto. Las enfermedades reumatológicas suelen requerir tratamiento farmacológico y supervisión médica.

  2. Evaluación previa: Es esencial que el osteópata trabaje en colaboración con el reumatólogo, para asegurarse de que las técnicas sean adecuadas y seguras para la condición específica del paciente.

  3. Cuidado en episodios agudos: Durante fases agudas de enfermedades inflamatorias, algunas técnicas pueden estar contraindicadas, por lo que el tratamiento debe adaptarse cuidadosamente.

En resumen, la osteopatía puede contribuir al manejo integral de las enfermedades reumatológicas al abordar síntomas físicos y emocionales, mejorando así la calidad de vida del paciente. 😊

Evidencia científica

La evidencia científica sobre la efectividad de la osteopatía para la artrosis es algo limitada, pero algunos estudios pequeños sugieren que la manipulación osteopática puede ser eficaz para aliviar el dolor y mejorar la función en personas con artrosis, especialmente en la artrosis de rodilla. Sin embargo, los resultados no son concluyentes, y se necesitan más investigaciones de mayor calidad para establecer recomendaciones firmes. 

Por ello, el osteópata debe volcarse en su propia expericencia. Dejo algún caso de valor aplicado en mi gabinete. 

El primero de ellos se trata de una mujer 

T.P., (1.12.54), trabajadora del hogar. Le trajo a mi gabinete un dolor de manos que llevaba arrastrando desde hacía más de 3 años, un caso cronificado. La inflamación en la AMF, (articulación metacarpofalángica), del dedo índice de su mano derecha, es muy visible. También vemos marcadas en la fotografía sus articulaciones ínterfalángicas distales, no sólo el nivel de desgaste en las caras internas de los dedos, sino también en la deformación artrítica. 

En el nivel de los dedos y manos, el trabajo es de elastificación articular, dedo a dedo, falange a falange, de tal forma que empiecen a ser nutridas todas y cada una de las articulaciones.

Y hacemos una técnica de normalización osteopática sobre su dedo índice, la articulación que une la mano con el dedo, (AMF) 

Continuamos con el estudio de cuello para dejar en evidencia la lesión de movimiento vertebral. Tres vértebras cervicales, 2ª, 3ª y 4ª, son las que nos encontramos bloqueadas en rotación derecha.

En 2ª sesión terminamos de normalizar el movimiento de la columna cervical y continuamos con el trabajo de manos y codos.

Cuatro días después volvemos a encontrarnos. 


El dolor se va localizando ya sólo en el área del cambio mano-dedo índice. Hay ligera inflamación artrítica, y en 4ª sesión dejamos realizado un vendaje funcional que nos ayude a que haya movimientos falángicos reducidos para su absorción inflamatoria, así como adiestramiento de posición de sendas falanges para los dedos índice y corazón derechos. 

Es un vendaje que en primer término quedan envueltas sus falanges, y en segundo término quedan envueltas conjuntamente sus articulaciones, separadas con una pared almohadillada entre ambos dedos.

Seguimos trabajando en la base del masaje para reducir el nivel toxémico alrededor de las articulaciones, y movilización en la 2ª articulación metacarpofalángica del dedo índice de su mano derecha, y sobre las articulaciones inter-falángicas. 




Os muestro el resultado de seis sesiones de trabajo. Fijaos en la inflamación de la mano con respecto a la primera fotografía y la reducción del desvío de las articulacioens interfalángicas distales del 2º y 3º dedo.


Resultado Final

La reducción del dolor es considerable, quedando sintomas ligeros sólo en la articulación metacarpofalángica, (2º nudillo)

Otro caso de fondo diferente es el que presento ahora.

Es el caso de un señor de 80 años de edad que vino con su hijo desde Valencia capital, con dolores en tobillos y rodillas, y desde luego, vemos en imágenes, (os las cedo), su proceso degenerativo. 













Sin embargo, si seguimos hurgando, es decir, le damos una buena exploración física, vamos a ver una serie de cosas que le han ido desmejorando por ir compensando por dolores. Y es que aparece un viejo esguince de tobillo derecho, en su ligamento peronéoastragalino anterior, (externo)

Bloqueos articulares en 

· tobillo- - - 1ª cuña pie derecho; las 3 cuñas del pie izquierdo

· rodilla- - - movimiento en aducción rodilla izquierda; en extensión, rotación interna, y también aducción, la rodilla derecha.

Si esto no lo remediamos, no sólo se va a mantener el dolor, sino que va a dejarle sin poder moverse en breve. Me dice que en el estadio de fútbol del Valencia, (valencianista de pro), ya a veces no va a ver el fútbol porque se ve imposibilitado subir-bajar escaleras, (aun siendo medicalizado!!!).

Con esta valoración que he hecho monto un plan de trabajo para un par de sábados que va a aprovechar a venir para ver también a los nietos. Comienzo con masaje en piernas. Nos paramos después a trabajar con buena técnica de Cyriax, (no profundizando más allá de su umbral de dolor, con lo cual se le hace agradable la intervención manual), en su ligamento distensionado, el que recupera de tal forma, que comienza a caminar sin acordarse de su lesión, o al menos, cuando la busca ya no la encuentra. 

Desde la 1ª sesión comenzamos con las técnicas de normalización osteopáticas para sus tobillos; y movilizamos rodillas y caderas en la 2ª sesión.

Contento; muy contento me cuenta en su 2ª visita. Cuando escribo este caso, me dice el hijo que está encantado con sus "nuevas piernas".

Eso sí, aún le queda trabajo que realizar en piernas y resto del cuerpo, por su estado, que se va a encargar de realizarselo un colega osteópata en Valencia.

Dejo un tercer caso de una funcionaria de 68 años cuando visitó mi gabinete. LLegó por un fuerte dolor en su cadera izquierda, (articulación coxofemoral). Llevaba implantado un generador neuroestimulador para regular los prolapsos de dolor.

El cuadro clínico era más que interesante, bajo mi punto de vista, para trabajar con ella con técnica y paciencia porque requería de ayuda:

  • Osteopenia 
  • Aracnoiditis 
  • Esguince cervical 
  • Espondilitis anquilosante 
  • Doble hernia discal, (L2·L3 y L4·L5) 
  • Estenosis en el canal lumbar 
  • Escoliosis lumbar 
  • Dismetría pélvica

En intervención quirúrgica ha sufrido una artrodesis para eliminar el movimiento a nivel lumbosacro.

La cuestión es, cómo empezamos, o como me dijo ella en la creación de esta historia:

-¿"Puedes hacer algo por mí?"

 Me gusta hacer una pregunta a todos mis visitantes: 

 -¿Por qué crees que ha sucedido todo esto?

Desde luego, este es un caso para examinar a cualquier estudiante de osteopatía, o de reumatología, o de traumatología, o de neurología, ¿o no, doctores?

Lo que podemos hacer, ya que la cirugía en este caso ha llegado a su techo, es plantear un trabajo inteligente y advertir a la persona que es un trabajo largo, más bien, de por vida.

Y nos ponemos manos a la obra. Debemos empezar con la pelvis, de donde sale todo el mal, junto a sus articulaciones coxofemorales.

1. Trabajo su dismetría pélvica, así comenzamos intervención osteopática. Ya en siguientes sesiones comenzamos con sus articulaciones coxofemorales, durante 5 sesiones, con intervalos entre sesiones de 10 a 15 días.

2. Damos información neurológica para el mantenimiento y disminución del dolor con una sesión de osteopatía craneal.

3. Hacemos un amplio trabajo de tejido blando y sistema nervioso periférico, especialmente en la cintura pélvica durante varias semanas.

4. Osteopatía sacro-craneal. Aquí desplegamos toda una sesión de liberación somatoemocional y técnicas de liberación miofascial.

Estuvimos trabajando cinco semanas, momento en el que sufrió su última multi-intervención quirúrgica donde le cambiaron y recompusieron la estación del generador neuro-muscular. 

Volvimos a intervenir sobre el movimiento craneal para ayudar a regular la información de sus nervios craneales en una sesión de osteopatía craneal.

La mejoría es más que espectacular, especialmente, porque su calidad de vida ha aumentado significativamente.

Creo que estos tres casos son orientativos para orientar al lector.

tratamientos complementarios

Aunque los tratamientos médicos convencionales, como medicamentos y terapias físicas, son esenciales, muchos buscan alternativas y enfoques naturales para complementar el manejo de esta condición. Aquí te presento algunas opciones: 🌿


1. Cambios en la alimentación

Una dieta equilibrada puede reducir la inflamación y apoyar la salud articular:

  • Ácidos grasos omega-3: Encontrados en pescados grasos (salmón, sardinas) y semillas de lino, ayudan a disminuir la inflamación.
  • Antioxidantes: Consumir alimentos ricos en vitamina C (cítricos, pimientos) y E (almendras, espinacas) protege las articulaciones.
  • Evitar alimentos proinflamatorios: Como azúcares refinados, harinas blancas y grasas trans.
  • Cúrcuma y jengibre: Especias con propiedades antiinflamatorias que pueden añadirse a la dieta o tomarse como suplementos.


2. Suplementos nutricionales

  • Glucosamina y condroitina: Suplementos populares para el cuidado de las articulaciones, aunque su efectividad varía entre individuos.
  • Colágeno hidrolizado: Puede mejorar la elasticidad y resistencia de las articulaciones.
  • Vitamina D y calcio: Esenciales para la salud ósea y articular.
  • Boswellia serrata: Extracto de planta conocido por sus propiedades antiinflamatorias.


3. Terapias físicas alternativas

  • Acupuntura: Ayuda a aliviar el dolor al estimular puntos específicos del cuerpo.
  • Terapia con calor y frío: El calor relaja los músculos y alivia la rigidez, mientras que el frío reduce la inflamación y el dolor.
  • Hidroterapia: Ejercicios en agua tibia que reducen el impacto en las articulaciones.
  • Masajes terapéuticos: Pueden mejorar la circulación y aliviar el dolor muscular asociado.


4. Actividad física adaptada

El ejercicio suave ayuda a mantener la movilidad y fortalecer los músculos que sostienen las articulaciones:

  • Yoga: Mejora la flexibilidad y reduce el estrés.
  • Tai chi: Ejercicios de bajo impacto que mejoran el equilibrio y la coordinación.
  • Caminar o nadar: Actividades aeróbicas suaves que no sobrecargan las articulaciones.


5. Plantas y remedios herbales

  • Harpagofito (garra del diablo): Utilizado tradicionalmente para reducir el dolor y la inflamación.
  • Ortiga: Puede tomarse en infusión para aliviar el dolor.
  • Árnica: Uso tópico en forma de cremas o geles para calmar las áreas afectadas.


6. Terapias complementarias

  • Mindfulness y meditación: Ayudan a manejar el dolor crónico al reducir el estrés.
  • Electroterapia: Técnicas como TENS (estimulación eléctrica nerviosa transcutánea) pueden aliviar el dolor.
  • Terapia con ozono: Aplicada en algunos casos para mejorar la circulación y reducir el dolor articular.


7. Hábitos saludables

  • Mantén un peso adecuado: Aliviarás la presión en las articulaciones, especialmente en rodillas y caderas.
  • Evita el sedentarismo: Mantenerse activo es clave para prevenir la rigidez.
  • Descanso adecuado: Un sueño reparador ayuda a la recuperación de los tejidos.


Precauciones

Aunque estos enfoques pueden complementar los tratamientos convencionales, es importante consultar a un médico antes de iniciar cualquier terapia complementaria. Algunas sustancias pueden interactuar con medicamentos o no ser adecuadas para todos.

Contraindicaciones

Como en todo tipo de terapias, hay que tener en cuenta el estado de la lesión, cómo se encuentra la persona psicológicamaente para administrarle osteopatía y el estado general.

El tratamiento osteopático puede ser beneficioso para la artrosis, ya que busca mejorar la movilidad articular, aliviar el dolor y optimizar la función del cuerpo. Sin embargo, existen contraindicaciones que se deben tener en cuenta antes de iniciar este tipo de tratamiento. Estas contraindicaciones pueden ser absolutas o relativas, dependiendo del estado del paciente y la técnica utilizada. Aquí te detallo las principales:


Contraindicaciones absolutas

  1. Inflamación aguda severa:

    • Brotes inflamatorios intensos en articulaciones afectadas por artrosis (p. ej., artritis reumatoide activa o infecciones articulares como artritis séptica).
  2. Infecciones activas:
    • Procesos infecciosos en tejidos cercanos a la articulación afectada.
  3. Fracturas recientes:
    • Presencia de fracturas en o cerca de la articulación afectada.
  4. Enfermedades óseas graves:
    • Osteoporosis severa o patologías como tumores óseos que puedan comprometer la integridad del hueso.
  5. Condiciones neurológicas críticas:
    • Compresión medular o radiculopatías severas que puedan agravarse con la manipulación.
  6. Coagulación alterada:
    • Trastornos hemorrágicos o anticoagulación excesiva que aumenten el riesgo de hematomas internos.
  7. Cirugías recientes:
    • Áreas quirúrgicas no completamente cicatrizadas.


Contraindicaciones relativas

  1. Dolor agudo severo:

    • Si el dolor es muy intenso, se deben evitar técnicas agresivas o movilizaciones excesivas.
  2. Hipermovilidad articular:
    • Aunque la artrosis suele asociarse con rigidez, en algunas personas puede haber inestabilidad articular que contraindica ciertas manipulaciones.
  3. Condiciones vasculares:
    • Enfermedades como aneurismas o trombosis venosa profunda (especialmente en áreas cercanas al tratamiento).
  4. Cambios degenerativos avanzados:
    • En casos de artrosis muy avanzada, manipular puede ser contraproducente si hay daño severo en el cartílago o deformidad ósea.
  5. Presencia de prótesis o implantes:
    • Las técnicas deben adaptarse para evitar dañar estructuras artificiales.
  6. Problemas médicos generales:
    • Hipertensión no controlada, insuficiencia cardíaca, o cualquier enfermedad sistémica descompensada.


Precauciones generales

  • Realizar una evaluación médica previa para descartar patologías no detectadas.
  • Adecuar las técnicas osteopáticas a la tolerancia del paciente.
  • Evitar maniobras que generen dolor o incomodidad significativa.

  • Informar al paciente sobre los objetivos y límites del tratamiento.

Conclusión

Dependiendo del carácter de la persona mayor, recorreremos el camino con mayor o menor fluidez, aunque siempre amparándonos en la evolución y resultados que vayamos obteniendo.

Por los mayores, salud responsable.

No hay que conformarse con que un viejito nos diga "tengo artrosis". Cuando vamos más allá encontramos el por qué, y le devolvemos su calidad de vida.

La pregunta vuelve: 

-"¿Durante cuánto tiempo tengo que seguir este trabajo?" 

-"¿Podemos ampliar el espacio entre sesiones?"

Si tienes dudas específicas, un osteópata cualificado y un médico pueden trabajar juntos para establecer el mejor enfoque para tu caso. 😊

Si bien la osteopatía puede ser útil como parte de un enfoque multidisciplinario para manejar la artrosis, es importante tener expectativas realistas. Los tratamientos osteopáticos pueden ser efectivos para mejorar la movilidad y aliviar el dolor en algunos casos, pero no son una solución curativa para la artrosis. Siempre es recomendable combinar la osteopatía con otros tratamientos convencionales recomendados por un reumatólogo.


José Enriqiue García G.
Osteópata bajo normativa europea EN16686/2015
Máster en Osteopatía Bajo Evidencia Científica y Práctica Clínica



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